Desde que iba en primer semestre de bachillerato conocí a este hombre, cursaba primer semestre, tenia 16 años para transportarme al colegio tenia que transbordar y no me gustaba tomar pesero, ya que siempre iban muy llenos de los alumnos del colegio, así es que siempre tomaba taxi.
Una mañana como cualquier otra, me subí en un taxi como siempre, jamás prestaba atención a los pasajeros o al taxista, pero esta vez algo hizo que rompiera con eso y surgiera de pronto un interés en los taxis, me subí en el asiento del copilotó porque los de atrás ya venían ocupados, pero en donde vio, un lugar de México, los taxistas acostumbran llevar a dos pasajeros en el asiento de adelante.
Poco después de que subí un señor algo grande subió, hice un gesto de desagrado, porque tendría que pasar el transcurso todo incomodo, entre dos hombres que ocupaban algo de espacio, yo era delgado en ese entonces y aun lo sigo siendo pero entonces lo era mas, el taxista se veía de cuerpo robusto, y el otro señor era mas bien grande y un poco gordo, en fin que no era mucho lo que iba a pasar así apretado……
Di los buenos días como siempre y me dispuse a escuchar música, pocos segundos después ya apretado entre ese par de hombres, yo estaba muy cerca del taxista y el al mover la palanca Rosaba bruscamente mi pierna, lo que hizo que empezara a ponerle atención a este hombre, para empezar su aroma era muy rico, tanto que daban ganas de acercarme mas….. Pero no podía claro, se le notaban buenas piernas como de futbolista casual y unos brazos marcados y llenos de bellos, (ese tipo de hombres me excitan, los llenos de bellos) imagine cosas al ver sus brazos, luego imagine sus piernas llenas de bellos, y me fui prendiendo mas. No lo podía creer me excitaba un taxista, pensé en voltear a mirar su cara, ya que si estaba tan sabroso del cuerpo tal vez también de la cara, pero temí a que se diera cuenta el y los demás pasajeros, así es que solo me conforme con echarle un vistazo mas a sus piernas por esta vez, era obvio que tenia que volverlo a ver a como diera lugar, y no quedarme con las ganas de ver su cara.
Así que al bajar me quede encantado, todo aquel día solo pensé en esas piernas y me imagina cosas con ese hombre.
Trate de encontrarlo pero no tenia mucha suerte y no tenia a quien preguntarle, si le preguntaba a alguna amiga, me iba a empezar a cuestionar y no quería que nadie supiera en ese entonces por mi gusto por los hombres, pues además acababa de tener una novia amiga de todos y todas, en fin que pensé en buscarlo por mi propia cuenta, pero no tenia ningún resultado, hasta que un dia sin pensarlo escuche a una compañera de claces hablarle a las demás sobre un taxista que les gustaba a todas, entonces sin que se dieran cuenta escuche su conversación, lo definían como el sabroso del taxi, y mencionaron su nombre, en ese momento supe que quien me robaba el sueño se llamaba David, me entere de lo necesario, tenia 23 años, (yo tenia 16), era del sitio San Isidro, con numero de taxi 8216, mi siguiente paso era verlo de nuevo, un dia después de la escuela, decidí esperar hasta que pasara, alrededor de hora y media duro mi espera, y por fin paso y venia disponible, le hice la parada y para poder contemplarlo mejor me subo en el asiento trasero, pude comprobar lo que habían dicho mis compañeras, era un hombre muy guapo, cuerpo espectacular (para mis gustos) grande, fortachón, brazos fuertes, espalda ancha, piernas bien formadas, peludo, cabello castaño rizo, y tenia una boca que se veía deliciosa, unos ojos miel que hipnotizan, todo esto lo complementaba una sonrisa encantadora, creo que fui tan obvio que se dio cuenta de cómo lo miraba, pero de lo cual no hizo ningún comentario, solo se limitaba a preguntarme el destino que yo llevaba,
Fueron varias veces las que me subí en su taxi sin nunca decirle nada, pues me moría de la pena,
Cuando iba en quinto semestre en mi ultimo año de bachiller, al salir de la escuela trabajaba en el cyber-café de un amigo, el que a veces cuando se me hacia tarde me iba a dejar hasta mi casa. Pero hubo una vez que por algún compromiso no llego y ya era muy tarde era difícil encontrar transporte a esa hora en ese lugar, eran mas de las 10 de la noche, estaba en la parada del camión esperando solo poder irme a mi casa, pues ese lugar de noche dicen es muy peligroso, por las pandillas de la ciudad.
Espere unos 10 minutos después pude ver a lo lejos la luz de un carro era un taxi se notaba por el anuncio, cuando estuvo cerca, le hice la parada, el se paro y me dijo “ya no estoy trabajando, lo siento”.
Aquel taxista era David, yo todo nervioso, además de por el susto de estar ahí tan tarde, por verlo a el, le suplique que me llevara, que le pagaría mas de lo normal, pero que me llevara a casa.
A lo cual respondió.
David: pero es que yo voy para nazareno (un pueblito cerca del que yo vivo)
Yo: para haya voy yo (aun temblando)
David: esta bien súbete, pero me voy a ir por el camino de abajo (un camino de terracería y poco transitado, pero que acorta considerablemente el trayecto)
Yo: esta bien
Ya en el trascurso del camino me hizo plática.
David: ¿y ahora porque tan tarde? ¿Apenas saliste del colegio? (el ya me conocía de vista, por las veces que había esperado para irme con el)
Yo: no, es que trabajo,
David: ¿y a esta hora sales todos los días, es algo tarde no crees?
Yo: si, no, bueno
El se soltó en una carcajada y noto mi miedo, a lo cual hizo un comentario
David. Tranquilo, puedes empezar diciéndome porque estas temblando
Le empecé a contar y así fue fluyendo la plática mientras transcurría el camino
Yo: ¿y a que vas a naza?, ¿alguna novia?
David: no, aun no, pero hay muchachas guapas por tu rumbo, ahorita voy a cobrarle a un conocido que me debe dinero, y tu, ¿tienes novia?
Yo: no, terminamos hace un par de meses
David, eso es algo, ¿Cómo le haces para aguantarte?, dame un tip
Yo: ¿de que?, ¿sin coger?
David: si es que yo llevo dos meses sin poder coger porque no eh encontrado alguna vieja, así es que ando bien caliente, solo uso mi mano, pero no es lo mismo.
Yo: pues yo con la tarea, de la escuela ya tengo como para no querer sexo, me quita u buen de tiempo, y no te creo que lleves tanto tiempo, has de tener un ben de viejas.
David: ¿Por qué lo dices?
Yo: pues feo no eres, además los taxistas siempre tienen un buen de viejas
David: gracias wey, pero no es mi caso, sabes viendo este camino tan solo, creo que ahorita de regreso me voy a quedar por acá haciéndome una, jajajaja
Yo: y porque ahorita de regreso, puede ser de una vez, por mi no hay bronca, yo me hago una también, para hacernos compañía, jajajajaa
David: no chingues wey, me cae que eres puto, quien lo dijera, si ni se te nota
Yo: el simple hecho de que te acompañe en tu chaqueteo no quiere decir nada, malo que hiciéramos otra cosa.
David: otra cosa como que
Yo: pues fajar, tener sexo, en fin tantas cosas que se pueden hacer en un lugar solo como este.
David: eres un puto wey, yo no soy como tu,
Yo: no se necesita ser puto para hacer esto wey, tu tienes ganas, yo también, estamos solos, cual es el problema.
David: el problema es que no lo hago con hombres
Yo: de lo que te pierdes,
David: jajajaja, no chingues no vayas a salir con que eres mejor cogiendo que una vieja.
Yo: ¿quieres comprobarlo?
El se sonrojo, y se quedo en silencio por un instante
Yo: neta wey que desde que te vi, te me antojaste de a madre, estas muy sabroso, y me encantaría por lo menos hacerte un oral, solo déjame hacer eso, y si no te gusta pues no sigo.
David: ni madres, ni que no hubiera viejas para coger
Yo: entonces que vas a hacer hoy con tus ganas, déjame ayudarte, solo mamártela, para bajártela un poco esa calentura que traes.
David: la neta se me antoja un buen que me la mamen, solo una vez me lo han hecho y me gusto mucho.
Yo: pues ahora es cuando de volverlo a repetir.
David: pero es que con un hombre, no wey, o lo que seas
Yo: tú olvídate de eso, ahorita los dos somos iguales, hombres que queremos explotar y dejar salir todo eso que llevamos dentro. Además esto solo quedara entre tu y yo, yo soy un hombre, no un puto que le cuenta todo a todos,
David: pues vamos a hacer algo entonces.
La platica me fu calentando, ya yo lo único que quería es sentir su verga en mi boca, poder besarlo, acariciarlo, abrazarlo, total que no espere nada mas y en cuanto lo dijo se la empecé a mamar dentro de su taxi, le jale el cinturón le desabroche el pantalón le baje el cierre y saqué con mi mano esa verga que ya empezaba a despertar, la empecé a tocar para luego metérmela toda dentro dela boca aun podía meterla toda porque no estaba aun muy despierta, traia un bóxer ajustado blanco que me prendía aun mas, poco a poco se fue engruesando y largando , a mi punto de vista era algo larga y muy gruesa lo cual me espanto, pero pensé si es de este hombre, no me importa nada, y seguí con emoción chupando su hermosa verga, le chupaba la puntita, le metía la lengua en el orificio del glande, y podía escuchar como gemía del placer, y cada vez lo hacia con mas fuerza, me pedía mas y mas, y agarraba mis orejas empujando mi cabeza contra su verga, me apretaba con una mano la espalda, como queriéndola arañar, yo me excitaba mas con el simple hecho de que me tocara, era como un sueño, con forme se la mamaba, fue bajándose mas los pantalones y ahí pude ver sus piernas llenas de palos rizados, eran excitantes y bien formadas, y cada que gemía de placer las apretaba tan fuerte dejando ver como se marcaban unas piernas muy muy buenas. La mame por un buen rato, me la metía en la boca los mas que podía, el se notaba encantado, y su sonrisa y lujuria lo decían todo, se la apretaba, y la subsionaba haciéndolo gemir en ocasiones mas fuerte.
Yo: te gusta papi?
David: si cabron, sigue
Después de un buen rato entre mamadas y el excitándose cada vez mas, me dijo que ya casi, en ese momento deje de mamársela y le dije que apenas estábamos empezando, que debíamos de seguir.
David: se que esto no esta bien, pero es riquísimo, ¿Qué quieres hacer?
Yo: quiero darte un beso
David: nunca eh besado a un hombre.
Yo: inténtalo, o si no quieres que sea en la boca puede ser en otro lado
David: en donde propones o como es eso?
El no sabia que era un beso negro y yo quería darle uno, pero no quería que se apagara al oírlo y no le gustara así es que platee otra cosa
Yo: quiero que me metas la verga
David: esta bien, hagámoslo
El estaba tan excitado por aquella mamada que accedió rápidamente pero sugirió que nos metiéramos en un camino, sin salida pero muy cómodo para lo que haríamos, al fondo estaba totalmente solo y podíamos hacer lo que quisiéramos, yo accedí e inmediatamente el arranco su taxi y nos adentramos en ese camino muy reducido y con mucho bache y piedras, llegando ahí, nos bajamos, apago las luces de su taxi, abrió la cajuela y saco una colchoneta, la cual pregunte para que llevaba.
David: uno nunca sabe en donde va a terminar la noche
Yo: si verdad
Entonces yo saque de mi mochila una cajita con dos condones, igual pienso yo que uno nunca sabe que puede pasar
David: vienes preparado, coges con el del cyber?
Yo: estos siempre los he guardado para ti dije en tono de burla
El sonrió, yo me le acerque lo abrase y le quite la camisa rompiéndole un par de botones.
David: eres una putita, eres mi putita. Así te voy a romper el culo cabron
Cachondeamos por un rato mientras yo le mordía las tetillas, y el me apretaba las nalgas y nos abrazábamos, el no accedía a un beso
Me quite la playera y el pantalón quedando en bóxer
David: porque lo haces no es necesario
Yo: tu deberías de hacer lo mismo
El no quería, hasta que lo excite aun mas abrazándolo mientras le chupaba con fervor y mordía las tetillas y le jugaba la verga con la mano.
Le baje los pantalones hasta los pies dejándolo en bóxer, su verga se le notaba mucho y mas bajo ese bóxer blanco, empecé a mordérsela cariñosamente por encima, luego me baje a besar y lamer sus piernas, era un hombre exquisito
Se sentó sobre la colchoneta, y ya con el bóxer abajo empecé a mamársela de nuevo, con la misma técnica haciéndolo gritar de placer, esta vez también le mame los huevos, y me bajaba con mi lengua recorriendo sus piernas, fue así como lo hice deshacerse de su pantalón. Mi boca era ya una conjugación de mi baba y su liquidó pre seminal, era testigo de su excitación cuando apretaba sus piernas y se le marcaban los músculos del abdomen y las piernas que eran bastante sabrosos, el me pedía mas y mas….
Por ultimo me deshice de su bóxer y el mío , estábamos desnudos frente a frente bajo la luz de la luna, y era la noche perfecta.
El seguía sentado lo puse en una posición en la cual podía mamar bajo sus huevos y empecé a hacerlo, estiraba, mas mi lengua tratando de llegar mas lejos, al parecer le gusto, porque al sentir que estaba yo llegando a donde siempre había querido, su hoyito, el se levanto un poco como para darme mas paso a ese lugar también rodeado de pelos, lo voltee un poco dejándolo de lado y me puse tras d el, el no negó nada, lo abrasé por detrás y fui mordiendo su espalda. Mientras tenía mi mano apretándole la verga, fui bajando hasta llegar a su culito y primero le bese ambas nalgas bastante bien redondeadas y llenas de carne. Después le metí poco a poco la lengua y le abrí el culo, el primer lengüetazo que le di, el lo cerro con mucha fuerza, yo le sugerí que se relajara que nada pasaría, el accedió y fue aflojando un poco, hasta que pude saborear su culo, el en veces gritaba sin ningún pudor, pidiéndome mas adentro mi lengua, y por su propia voluntad se puso en una posición de 4 abriendo bien su culo dejándomelo para que me lo pudiera comer como quisiera, fue de los momentos mas ticos, el estaba perdido en un mundo donde solo existía la excitación porque lo dejaba ver en sus gemidos gritados. Después lo pare y subí una de sus gordas piernas sobre la parte trasera del taxi abriéndole mas el culo, y se lo seguí comiendo, en esta posición le mame un buen rato de nuevo su verga y sus bolas, era el culo virgen mas rico que me había comido, fresco y jugoso por mi baba, de nueva cuenta me dijo que casi se venia.
Como pude encontré el condón tirado en el suelo, se lo puse en su verga dura que con mis lamidas de culo, se había tornado aun mas dura y lista para el toque final, me arrodille en la colchoneta con el culo hacia arriba, juguetee con mis dedos y sus dedos mi entrada, la llene de salida y puse la punta de su verga en mi entrada, abrí bien mis piernas, arrodillado el detrás de mi, empezó a empujar.
Era una experiencia mágica sentir como iba abriendo con su verga mis entrañas, era lo que había soñado mas de una vez, con ese hombre, lo hizo despacio y con un poco de ternura, era la primera vez que lo metía en un culo, pues el dice que siempre había sido muy tradicional, cuando lo sentí casi todo dentro lance un grito de dolor, pedí que para por un momento, que lo dejara ahí que ya me acostumbraría, pero no tuvo compasión y me dijo: “esto querías no?” ahora te aguantas, después de entrar su cabeza, entro todo lo demás sentía mi ser lleno de ese hombre, y me excitaba el solo echo de saber que era el el que me cogía, la metió hasta el fondo, hasta donde pude, sentía como me faltaba la respiración , y como se abría mi culo cuando la jalaba y la empujaba, me tomo de las caderas jalándome hacia atrás mientras el empujaba, yo estaba rendido ante lo que me pidiera….
Era doloroso pero riquísimo, mis gemidos hacían que me lo metiera mas fuerte, y yo gemía aun mas el sudaba y sentía como su sudor y el mío se volvían uno y escurría por mi espalda, de pronto me tomo de los pectorales los apretó y siguió, después me volteo, subió mis piernas sobre sus hombros y me la metió de nuevo, esta vez de un solo tiro, grite sin pensarlo del dolor y el se acerco a mi y me dio un beso para callarme yo no desaproveche y lo jale hacia mi quedando abrazados con su verga dentro de mi fundiéndonos en un beso de placer, que al parecer siendo el primero que le daba a un hombre lo disfrutaba, después solo me dejo de besar y siguió metiéndomela, sin cansancio, fue el único beso que medio esa noche, pero no importa por todo lo demás que estaba pasando, de repente empezó a hacerlo muy muy rápido avisándome que estaba apunto, yo empecé con mi verga a jalármela también para que termináramos juntos, era maravilloso como se movía, de pronto suspiro y dijo ya ya ya, fue en eso que salió un chorro de semen de mi verga y apreté lo mas que pude mi culo y su verga, el grito del placer, y mientras apretaba una de mis manos y con la otra me sujetaba de la cintura, pero al verme chorrearme empezó a embarrar mi semen sobre mi cuerpo, fue fantástico, al terminar estábamos sudando, nos miramos fijamente un buen rato, el me sonrió y me dio que jamás había imaginado que el mejor sexo en mucho tiempo seria conmigo, me abrazo y sugirió que nos fuéramos, nos limpiamos, nos vestimos, y el me fue a dejar a mi casa, varias cosas pasaron después…
Si después
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